Sé que tengo pendiente
hablar de otros temas (y sí, actualizar la información de algunas de las novelas),
pero hoy me apetecía contaros algo que me preguntan mucho: dónde encuentro y cómo elijo a los lectores cero o
lectores beta.
Para quienes no lo
sepáis, un lector cero es aquel que lee tu obra antes de su publicación. Te da
su impresión, te dice qué cosas se pueden mejorar, dónde te has columpiado… Es
un filtro más que pasar antes de dar por terminado el libro.
Antes de publicar con
editorial, mi única lectora cero era mi madre, aunque no se leyó el libro de 13
horas en Viena antes de mandarlo a editorial. De hecho, como anécdota, resulta
que es el único libro que no leyó nadie antes de mi editora.
Desde que publiqué
13 horas en Viena el año pasado, sin embargo, he empezado a buscar lectores
cero para el resto de obras que escribo. ¿Por qué? Pues porque me parecen muy
necesarios. Así que os voy a hablar de las personas que se han leído mis libros
antes de mandarlos a editoriales, y por qué he elegido a cada una de ellas.
Es cierto que para 3
noches en Oslo busqué personas que leyesen la novela antes de su publicación,
pero no eran lectores cero propiamente dichos, porque el libro ya estaba en
proceso de publicarse. Su función era más bien promocional. Por eso hoy hablaré
de los otros, de los que han leído mis libros antes incluso de saber si
llegarían a la imprenta. ¡Ahí va mi lista de lectores cero fantásticos!
Mi primera lectora
cero, como he dicho ya, es mi madre. Normalmente es una de las primeras
personas que se lee mis libros. Es maestra, así que siempre me ayuda con las
faltas de redacción, los errores de sintaxis, las frases que en mi cabeza
suenan del todo racionales y en realidad están escritas en marciano… Así que se
podría decir que mi madre representa un poco el filtro de calidad. Además, es
mi madre y, claro, me importa lo que opine, aunque a veces discutamos porque le
parece vulgar que diga “joder”. Ese es otro asunto, no siempre estarás de
acuerdo con las opiniones de tus lectores cero, por eso hay que saber cuándo
ceder y cuándo hacer caso de tu instinto. Hay mejoras que me proponen que
acepto sin dudar porque me doy cuenta de que tienen razón. Otras veces, como en
el caso de los “joder” y los “mierda” que a mi madre le hacen poner los ojos en
blanco, no hago caso. Eso depende de cada criterio.
Otra de las personas en
las que confío para esto es mi novio, que no es lector. Os preguntaréis ¿y para
qué quieres su opinión si no tiene ni idea de literatura?, pues es más bien por
una cuestión emocional. Me gusta compartir mis proyectos con él, últimamente se
está implicando mucho en mi trabajo (si habéis seguido toda la promoción que hice con Kenny sabréis a lo que me refiero) y a mí me encanta poder comentar con él mis
dudas, que me dé consejos y que me aporte su punto de vista. Por eso lee lo que
escribo, es un punto de apoyo.
Otro de esos lectores
cero es Meg, del blog Books, Villains and Tv. Además de ser mi amiga, está implicada
en el mundo literario, pero lo que de verdad interesa aquí es que es
extremadamente hater. En serio, es una de las personas más hater que conozco.
Así que Meg representa la opinión sincera y objetiva que también es muy
necesaria. A veces no coincidimos; ya lo he dicho antes, no siempre estás de
acuerdo con tus lectores cero, pero sé que cuando me dice que algo le encanta
es que le ha encantado de verdad, porque de no ser así también me lo habría
dicho, y eso es muy importante.
En mi último proyecto,
Lucía, del blog La estantería torcida, también ha hecho de lectora cero. Lucía
lee muchísimo, es una amante ferviente de la literatura y, lo mejor de todo es
que es una fangirl total. Es una entusiasta y reconozco que me encanta que lea
mis libros porque me sube mucho la moral. ¿Qué tontería, no? Pues no. Si habéis
escrito algo seguro que sabéis que hay varios periodos a lo largo del proceso de
creación en los que piensas que lo que has hecho es una absoluta porquería. Por
eso también es importante rodearse de personas que te digan lo contrario, que
confíen en ti y que te suban un poquito el ego de autor para que tengas fuerzas
para enfrentarte a lo que tendrás que enfrentarte, porque probar suerte en
editoriales y aguantar la espera es muy duro y tienes que estar preparado para
superar los fracasos y seguir creyendo en tu trabajo. Así que una persona como
Lucía es perfecta para que te mime un poco en tus días más difíciles. (Muchas gracias, Lucía).
Hay un par de amigas
lectoras que también se han leído algunos de mis libros para darme su opinión,
¡pero no suelen sacar ningún fallo! Son entusiastas, como Lucía, así que
supongo que cumplen un poquito ese papel de darte apoyo y cariño cuando más lo
necesitas.
Para mí, hay muchos
tipos de lectores cero, y debes buscar los que te interesan dependiendo de lo
que necesites en cada momento: el lector objetivo, el entusiasta, el crítico,
el experto en el tema que quieras juzgar… Es cuestión de saber qué necesitas y
buscar.
Ahora mismo estoy
escribiendo la tercera parte de 13 horas en Viena, y creo que esta vez voy a
necesitar más lectores cero porque me siento muy insegura con lo que estoy
haciendo. Cuando acabe, seguramente querré personas que sepan aconsejarme sobre
ciertos temas, personas a las que les guste leer y, sobre todo, amigas como
Lucía que me digan que lo he hecho bien pero que sepan juzgar también. Así que
esta lista de lectores cero fantásticos irá creciendo; estoy segura.
Espero que esta pequeña
reflexión os haya gustado y os haya servido si habéis escrito algo y estáis pensando en
buscar lectores cero. Creo que lo más importante es encontrar gente en la que
confíes y que pueda aportarte algo; tú decides qué.
Un abrazo.
Paula.
¡Hola! La verdad es que me ha ENCANTADO esta entrada. Es algo por lo que voy a pasar pronto, porque estoy a punto de acabar mi primera novela, la primera que me he tomado en serio y no solo buscaba mi propio divertimiento escribiendola (esto tb es super importante, saber disfrutar de la escritura). Me ha parecido muy útil.
ResponderEliminar¡Muchas gracias!
¡Nos leemos!
¡Hola! Me alegro mucho de que te haya servido. Ojalá te vaya muy bien con tu proyecto. Es verdad lo que dices, lo más bonito es disfrutar de la escritura.
Eliminar¡Un abrazo!
¡Hola!
ResponderEliminarViene bien tener lectores cero, que puedan darte una opinión de lo que estas escribiendo, yo en mi caso por primera vez estoy siendo una lectora cero y la experiencia me está pareciendo maravillosa.Y que decir que siempre es un privilegio poder leer una obra que aún no ha salido.
Nos leemos.
¡Hola! Gracias por compartir tu experiencia. Yo también creo que ser lector cero es muy bonito.
Eliminar¡Un abrazo!
Hols guapísima me ha encantado tu entrada, me ha encantado lo que has dicho y es que es asi para que alguien lea algo que has escrito y no esta ni publicado todavía tiene que ser alguien a quien le tengas confianza y que sepas que va a ser completamente sincero con su opinión y que te ayudará, ya sabes que yo cuando me hiciste lectora cero de 3NEO te fui comentando todo lo que me iba pareciendo, creo que es lo primordial siempre ayudar a esa persona a darle tu punto de vista sincero y que asi sepa lo que esta bien o mal y si gustará o no, por si asi puede cambiar slgo antes de mandarlo a editorial.
ResponderEliminarLo dicho que me enrollo jeje me a gustado lo que has dicho y ya sabes que aqui estoy para ayudarte si lo necesitas con lo tercera parte de 13h okis
Un abrazo enorme
¡Hola, guapa!
EliminarEres un encanto. Gracias por poder contar contigo. Lo que dices es verdad, es muy muy importante la sinceridad.
¡Un abrazo!
OMG Paula, es una artículo genial pero en mi mente se ha grabado TERCERA PARTE DE 13HEV O.O
ResponderEliminarVengo de ver justo un video sobre la importancia de los beta/cero y es que para mí es una de las mejores cosas que me ha aportado el mundillo lector :)
Sientes una responsabilidad enorme pero a la vez te lo tomas tan en serio que realmente opinas para ayudar y el feedback que se crea entre autor@ y beta es genial XD
Lo dicho, me ha encantado la entrada ¡un besito!
¡Hola! Muchas gracias Alhana, me alegra que te haya gustado.
EliminarYo también creo que es el feedback autor-lector es fantástico y muy enriquecedor. Antes no me daba cuenta, pero cada vez soy más consciente de la necesidad de los lectores cero.
¡Y sí, estoy escribiendo la tercera parte! Todavía queda mucho para que se publique, pero iré contando cositas por las redes porque estoy muy ilusionada con el proyecto.
¡Un abrazo!
Oh dios mio!!! todo genial pero sigo leyendo una y otra vez eso de tercera parte jajajaja y yo con el segundo sin leer, soy lo pero.
ResponderEliminarLa verdad es que estoy algo verde en eso de los lectores cero, hasta hace no mucho no sabía lo que eran etc pero seguro que es genial la experiencia tanto para el escritor como para el lector poder participar de esa etapa del libro ^^
Yo antes tampoco sabía a qué se dedicaban los lectores cero, pero ahora los veo como figuras muy importantes antes de la publicación de un libro.
Eliminar¡Sí! Estoy escribiendo la tercera parte. Queda mucho para que vea la luz, así que tienes tiempo para leer la segunda jajaja. Ahora mismo estoy tan metida en el proyecto que de vez en cuando cuento cositas por las redes. Uso el hashtag #ProyectoDi.
¡Un abrazo!